Anteriormente en nuestro blog de Carnicerías Juan Ortiz os hablamos sobre la carne mechada al estilo andaluz. Es un plato tradicional español que no debe confundirse con a carne mechada o el pulled pork. Por eso, hoy queremos hablaros del pulled pork al estilo americano, una elaboración que se ha puesto muy de moda en los últimos tiempos.

Qué es el pulled pork al estilo americano

La traducción al español del término pulled pork, sería algo así como cerdo desmenuzado. Pero, bajo este concepto aparentemente simple, se esconde una de las elaboraciones más demandadas de la cocina urbana actual.

Este plato tiene su origen en la cocina sureña americana, donde es tradicional tomar la carne de cerdo asada, posteriormente desmenuzada y servida con una rica salsa barbacoa.

El pulled pork al estilo americano se popularizó porque partiendo de una carne humilde, se consigue un gran resultado sin grandes complicaciones.

Trucos para que quede perfecto en casa

Uno de los trucos es escoger cortes que no sean excesivamente magros, pues la grasa que aporta la carne es fundamental para conseguir un resultado jugoso. Por eso, entre los cortes más utilizados para preparar pulled pork no faltan la aguja de cerdo, el jamón y la paleta o el cabecero de lomo.

Por otro lado, la carne se puede marinar con una mezcla de especias, que le aportarán un extra de sabor al plato. Entre otros ingredientes, suelen añadirse pimienta negra, pimentón, comino, ajo y cebolla en polvo, cayena, jengibre, orégano o tomillo. Pero también admite mostaza, miel, salsa Perrins o Worcestershire en el marinado.

En cuanto al cocinado, no hace falta pasarse horas y horas en una cocción lenta de horno. Afortunadamente, hoy en día contamos con las maravillosas ollas de cocción lenta, que nos dan resultados espectaculares sin tener que estar pendientes de ellas.

Otra gran alternativa es la olla rápida, idónea para quienes tienen menos tiempo. Y si no, la cocción tradicional en olla o cacerola, en la que podríamos necesitar entre 8 y 10 horas para que la carne esté en su punto perfecto.

Sea cual sea el método de cocinado, la carne tiene que quedar tierna y desmenuzarse fácilmente. Luego, preparamos una buena salsa y mezclamos para conseguir ese resultado único y delicioso.

Puede consumirse tal cual, como parte de otras recetas o para preparar deliciosos bocadillos o hamburguesas.